Decenas de zamoranos pudieron disfrutar en la noche de ayer de la segunda actuación de las Noches de Humor del Castillo de la mano del humorista Pablo Carbonell. El artista, que fuera componente de los Toreros Muertos en los años ochenta y con los que ahora ha vuelto a juntarse, realizó en la ciudad su espectáculo de canción cómica basado en distintos temas divertidos que arrancaron las carcajadas del público, que premió al humorista con sus aplausos.