Con 42 años al hombro, Jared Leto lleva muchos kilómetros de rodaje recorridos. Un tipo polifacético que hizo cosas muy estimables en el cine, la televisión y la música. Compone, canta, toca, actúa, dirige y produce. Acaba de ganar un Oscar como mejor actor secundario, pero su presencia en las redes es consecuencia mayormente de su pelo.

Paradójico pero entendible en tiempos tan banales. El pelo de Leto, raya en medio, melena larga, bicolor y liso. Muy a lo Jesucristo, según la iconografía al uso. Barba recortada y una mirada clara, un poco infantil. Apareció en la alfombra roja, en Los Ángeles, con su madre, Constance, a la que dedicó el premio. A ella y a un montón de gente más en lo que fue el discurso más emotivo de la gala de los Oscar.

A Leto, hasta la película ´Dallas Buyers Club´, se le conocía más por su papel musical al frente de una banda de rock alternativo, ´30 Seconds to Mars´, con la que ha ganado premios internacionales y, lo que es más importante, el dinero que supone vender más de diez millones de álbumes. En Dallas Buyers Club, Leto interpreta a un travesti. Son los años ochenta, la década en la que el sida arrasó con más fuerza. Comparte reparto con Matthew McConaughey, un vaquero de rodeos que acaba siendo víctima de la enfermedad, por entonces casi mortal de necesidad.

McConaughey apuntaba al Oscar, pero al final se lo llevó el secundario que no es tan secundario. Jared Leto tuvo una infancia dura. Abandonada por su padre, la familia deambuló y sobrevivió, a pie de carretera, en una comuna hippie y echando mano de la beneficencia social para poder comer. Una familia compuesta por su madre, Constance Lee, y por su hermano mayor, Shannon. Ellos formaron un triángulo férreo ante las adversidades, un nudo de los que no se desatan. Y el Oscar sirvió para hacer un acto de justicia y un homenaje filial.

Jared Leto subió al escenario, recogió su estatuilla, la levantó y miró a su madre, sentada en el patio de butacas. Y dijo: "Mi madre era una madre soltera que tuvo que dejar el instituto y logró tener una vida mejor, para ella y para sus hijos. Aquella chica es mi madre y está hoy aquí. Gracias por enseñarme a soñar".

A Shannon y a Jared los sacó de la pobreza un efímero marido de su madre Constance. El apellido Leto es de él y a pesar de que el matrimonio se vino abajo con apenas dos años de vida, Jared lo mantuvo no sólo como nominación personal sino también de guerra artística. Shannon y Jared crearon ´30 Seconds to Mars´. Jared canta, pero también toca el piano, el órgano y el bajo, entre otros instrumentos. Un talento innato para la música, pianista autodidacta al que le entusiasmaba la música de Led Zeppelin, Pink Floyd, Nirvana, The Cure y Radiohead y U2, entre otros grupos. Buen gusto. Por cierto, los integrantes de U2 estaban en el Dolby Theatre de Los Ángeles, siguiendo en directo la gala.

Cuando ´30 Seconds to Mars´ editó su primer disco en 2002, cuatro años después de la formación de la banda, Jared Leto ya llevaba una larga trayectoria como actor. En 1995 participó en la película «How to Make an American Quilt» y desde entonces ha mantenido actividad constante. En su historial, películas como ´El club de la lucha´ (1999), ´Inocencia interrumpida´, del mismo año, con la que Angelina Jolie ganó el Oscar, ´Requiem por un sueño´ (2000), ´La habitación del pánico´ (2002) y ´Alejandro Magno´ (2004).

El discurso del hombre de la melena, traje blanco y pajarita negra tuvo muchas más referencias que la de su madre Constance. Jared habló de los millones de enfermos de sida que se quedaron por el camino y de los que sufren injusticias por ser como son, en clara alusión a los homosexuales.

Fue novio de Cameron Diaz y ahora se le asigna en algunos medios del corazón una relación sentimental con Lupita Nyong´o, la misma que se llevó el Oscar gemelo al de Jared, el de mejor actriz de reparto, aunque otras publicaciones recuerdan que desde septiembre la actriz es novia del rapero de origen somalí K´naan, y que entre la pareja de oro de Hollywood sólo hay amistad.