Aaron Blaise, dibujante y animador de clásicos de Disney como El Rey León, Aladín, Pocahontas o La Bella y la Bestia, ha querido homenajear a Cecil, el león más querido de Zimbabue. Para ello no ha dudado en equipararlo a otro de los felinos más apreciados -este caso de la ficción- el icónico Mufasa. Todo con el objetivo de concienciar a la sociedad.

"Cuando escuché las noticias sobre Cecil me inspiraron para crear una imagen que sirviera de tributo. No es mucho pero, con suerte, hará pensar la gente", ha explicado Blaise en la web en la que ha compartido el retrato de Cecil.

Una imagen en la que se ve al león en el cielo, dibujado por las nubes, de forma similar a la que Mufasa se le aparece a Simba en el clásico de Disney, y a la que acompaña la famosa frase del padre de El rey león: "Mira a las estrellas. Los grandes reyes del pasado nos observan desde esas estrellas."

"Como podéis ver soy un gran amante de los animales y me saca de quicio cuando veo que estas preciosas criaturas son destruidas sin razón", ha añadido el animador, que también ha colgado un vídeo en el que se ve todo el proceso de creación.

Aaron Blaise se une así a otras personalidades del mundo del cine, como Mia Farrow, que también han expresado su rechazo al abatimiento del animal. Y es que, desde que se conoció su muerte, en las redes sociales se han sucedido las muestras de repulsa, desde todos los rincones del mundo.

Cecil tenía trece años y era uno de los animales más visitados del Parque Nacional Hwange del país africano. Fue encontrado en julio sin piel y sin cabeza. Al parecer, primero fue herido y más tarde abatido.

El culpable de acabar con el animal fue el dentista estadounidense Walter Palmer. Las autoridades han afirmado que este sacó a Cecil del parque nacional de Hwange mediante un cebo y disparó al animal con un arco y una flecha.

Los dos cazadores zimbabuenses que le organizaron la caza, Theo Bronkhorst y Honest Ndlovu, han comparecido ante un tribunal acusados de caza furtiva. Por su parte Palmer, que ya se ha marchado de Zimbabue, ha confirmado que mató al león el 1 de julio pero ha asegurado que creía que se trataba de algo legal.

Este dentista de profesión ha recibido numerosos insultos en las redes sociales por haber matado al león, se ha visto obligado a cerrar su clínica y Zimbabue pide su extradición para juzgarlo.