-¿Cuáles son las figuras de la escultura española en las que más se fija para sus obras?

-Chillida, Oteiza y Martín Chirino son los constructivistas españoles de los que más bebo. Evidentemente, intentas no copiarles pero, por deformación profesional, como ellos son los máximos exponentes de un estilo, al final sin querer relacionas las obras. Hoy en día es muy difícil hacer algo y que no se parezca a algo que ya han hecho.

-¿Cree que podría volver a darse en España una generación de escultores y arquitectos como ellos?

-¿Por qué no? Hay gente muy buena, pero no se está apostando por la cultura lo que se debería. No solamente en escultura sino en pintura, arquitectura, literatura y en cualquiera de las artes. Aunque haya mucho talento, no hay medios. Tengo alumnos que llevan 20 obras a las exposiciones y, si no venden dos o tres, ese mes lo pasa mal. Cuando tienes solucionadas las necesidades primarias, puedes dedicarte a ello de una forma casi altruista, pero si tienes que vivir de ello te planteas dejarlo y dedicarte a otra cosa. Yo animo a los artistas a que sigan peleando porque la cultura es muy importante.