Las ganas de picar algo pueden aparecer a cualquier hora del día. Y lo peor de todo es que, por alguna extraña razón, esa gusa pocas veces está relacionada con comida saludable. Porque, aunque intentes evitarlo, es normal que en ocasiones acabes comiendo algunos de los ´snacks´ menos saludables de toda la pirámide alimenticia.

Para que esto no ocurra lo más recomendable es hacer cinco comidas al día, incluyendo el almuerzo y la merienda. Y es que picar entre horas puede ser saludable y ayudarte a saciar el hambre si se siguen algunos consejos.

No te distraigas mientras comes

Muchas veces se comete el error de picar algo delante la televisión, estando con el móvil o trabajando en el ordenador. Esto implica que no se preste la suficiente atención a lo que se come y se acabe ingiriendo más de la cuenta. Por eso, si el hambre te ataca de repente y no puedes evitar comer algo, hazlo despacio y prestando atención al ´snack´. Eso sí, aléjate de la nevera para no caer en la tentación de volver a abrirla.

Aprende a medir las porciones

Conocer y medir el tamaño de las porciones es importante para llevar un control sobre las calorías que consumimos al día. Por ejemplo, los frutos secos no deben sobrepasar el puñado al día, mientras que en el caso de las frutas la ración es mayor ya que tienen mayor contenido en agua. Si prefieres picar un yogur o un huevo cocido, con una porción al día es suficiente.

Prepara tu tentempié en casa

Para evitar recurrir a las máquinas de ´vending´ o a los alimentos ultraprocesados, es mejor que seas previsor y preparares el tentempié en casa si ya sabes que te va a dar el hambre en el trabajo o en clase. Así comerás de una manera más sana y te ahorrarás el dinero de la merienda o el almuerzo.

El agua es tu mejor aliada

De sobra es conocido que beber al menos dos litros de agua al día aporta múltiples beneficios. Por esa razón evita los refrescos entre horas, aunque sean ´light´, y bebe agua para saciar tu apetito. Si te tomas un vaso de agua antes de las comidas notarás cómo te sacias más y reduces la ingesta de alimentos.

Elige bien lo que comes

Picar entre horas no implica consumir comida rápida o con alto contenido en grasa. La fruta, el yogur desnatado, los frutos secos o el embutido bajo en grasa son nuestros grandes aliados para llenar el estómago sin coger kilos de más. Si te apetece comer un ´snack´ hazlo, pero en cantidades pequeñas: la regla de oro está en no superar las 200 calorías.

Lee bien las etiquetas

Los ingredientes de un producto pueden cambiar sorprendentemente de una marca a otra. Así que, si el hambre te ataca de golpe y no te queda otra que comprar algo para picar entre horas, lee bien las etiquetas de las cajas o los paquetes. Así podrás encontrar los alimentos que tengan menos azúcares, calorías o los que sean más naturales.

Controla los ataques de hambre

La ansiedad, el estrés o la falta de un horario establecido para comer suelen hacer que los ataques de hambre aparezcan de la nada. Para no arruinar tu dieta lo mejor que puedes hacer es controlar estos problemas o tener preparado un tentempié saludable para cuando aparezcan.

Otra situación que estimula el apetito es la ingesta de alcohol, por lo que si quieres evitar engordar será mejor que controles su consumo las noches de fiesta para que no acabes comiendo cualquier cosa de madrugada.