La Semana Santa ya está aquí y con ella las vacaciones. Si este año no sales fuera de tu ciudad y tienes niños, es bastante probable que ya te estés volviendo loco para buscarles planes divertidos con el que ocupar su tiempo antes de que comiencen a repetir una y mil veces una de las frases más temidas por los padres, "¡me aburro!". ¡Aquí van unas cuántas ideas!:

La búsqueda de huevos de chocolate

El domingo y lunes de Pascua, en muchas ciudades de Europa, se organiza un juego que a los niños les encanta, la búsqueda de huevos de chocolate. La idea es que los mayores escondan varios huevos en diferentes lugares y los más pequeños los busquen y se queden los huevos como premio.

Al cine en familia

Uno de los mejores planes para estas vacaciones es el de ir al cine con los más pequeños de la casa. 'Dumbo' o 'El parque mágico' son algunos de los títulos que ofrece la cartelera estas vacaciones.

Una excursión mágica

Que no viajéis fuera de vuestra ciudad no significa que no podáis hacer una excursión a alguna localidad cercana que aún os quede por descubrir. También es una buena oportunidad para hacer una ruta de senderismo por algún monte o bosque cercano o visitar algún museo que les pueda interesar. Las visitas a castillos, acuarios, parques de atracciones o zoológicos también son siempre una buena idea.

Decorar huevos de Pascua

Si a tus hijos les encantan las manualidades proponles decorar unos huevos de Pascua. Antes de empezar a pintarlos con acuarelas o pinturas los huevos han de estar cocidos. ¡Seguro que esta actividad les encanta!

Cocinar postres de Semana Santa

Otra buena forma de entretenerles y conseguir sacarles un poco de las 'pantallas' es proponerles cocinar un rato. En esta ocasión, podéis aprovechar para hacer dulces típicos de estas fechas como torrijas, monas de pascua, pestiños o buñuelos de Cuaresma. ¡Recuerda no dejarles solos ante los fogones si aún no tienen la edad adecuada!

Recuerda además, que los psicólogos recomiendan dejar que los niños se aburran, ya que esto les ayuda a desarrollar su imaginación.