Muchos pueden pensar que la Semana Santa todavía está muy lejos y, la verdad, es que están en lo cierto. Estar pensando en las vacaciones que tendremos dentro de dos meses puede ser incluso algo exagerado, pero si de verdad queremos disfrutar de una aventura especial, los preparativos llevan mucho tiempo de organización. Por ello, es recomendable elegir nuestro destino cuanto antes y comenzar con antelación todos los preparativos.

Este 2020 la Semana Santa comenzará el domingo 5 de abril y concluirá el día 12 de ese mismo mes. Siete días en los que muchos deciden olvidarse de la rutina para vivir una de esas experiencias que quedan grabadas en la memoria. Aunque el turismo local y descubrir los rincones que esconde España es una gran opción, en este artículo te proponemos algo más. Un viaje a uno de esos lugares mágicos del planeta tierra.

Pamukkale, Turquía

'Pamukkale' podría traducirse en turco como 'Castillo de algodón'. Un nombre que hace honor a una espectacular formación geológica que deslumbra a todo el que la ve. Situado en la región Egeo en Turquía, donde se disfruta de un clima templado la mayor parte del año, esta zona es un gran atractivo turístico por su extrañeza y belleza desbordantes.

Los movimientos tectónicos que tuvieron lugar en la depresión de la falla de la cuenca del río Menderes causaron numerosos terremotos, que provocaron a su vez la aparición de numerosas fuentes de aguas termales. El alto contenido en minerales de estas aguas propició que se formara lo que se denominó 'Pamukkale'. De esta forma, toda la ladera del 'Castillo de algodón' luce un manto blanco impoluto, impropio de este mundo. Frente a ello, da la impresión de que estuviera cubierto de nieve, sal o hielo. Pero no, ninguna de esas explicaciones que busca nuestro cerebro es correcta. Son las grandes cantidades de bicarbonatos y calcio las que provocan esta maravilla sin igual.

Durante el siglo XX el 'boom' turístico provocó que se levantaran hoteles en la zona, se construyeran carreteras y se llenaran piscinas con el agua termal de este lugar. Todo ello estuvo a punto de hacer que el mundo perdiera una gran maravilla geológica. Sin embargo, la UNESCO tomó cartas en el asunto y mandó derribar las obras del ser humano para conservar este rincón mágico.

No cabe duda de que, 'Pamukkale' entra en uno de nuestros destinos favoritos para disfrutar en esta Semana Santa.

Cañón Bryce, Utah

Si tienes intención de visitar Estados Unidos, una de las paradas obligatorias es el Cañón Bryce situado en Utah. A pesar de que puede que para muchos esté a la sombra del Cañón del Colorado, lo cierto es que el Bryce es un espectáculo para todos los sentidos.

A diferencia del Colorado, el 'Bryce Canyon' no está formado por un río, sino que es un enorme paraje en el que se agrupan curiosas y espectaculares estructuras rocosas conocidas como 'hoodos'. Por ello, y a pesar de su nombre, no es un cañón como tal, sino más bien un anfiteatro natural propiciado por la erosión del viento, el agua y el hielo.

Este lugar cuenta con ocho senderos delimitados que se pueden recorrer para adentrarse en las entrañas de este espectacular paisaje. El aire de la zona es tan puro, que en los días claros se puede ver hasta 140 kilómetros en el interior de Arizona desde Yovimpa y Rainbow points. Además, la oscuridad del cielo convierte al parque en uno de los mejores lugares para observar las estrellas, donde se llegan a ver más de 7.500 astros.

Los colores rojizos, anaranjados y blanquecinos de sus 'chimeneas de hadas' dibujan un escenario de ensueño. Un lugar perfecto para disparar instantáneas en todas direcciones, pero sin olvidar que lo verdaderamente único es sentir un enclave tan especial como este. Con suerte y si estás atento, es posible que puedas capturar con tu cámara algún ejemplar de la fauna que habita en el parque nacional del Cañón Bryce, desde águilas, hasta ciervos pasando por pumas y osos negros.

Machu Picchu, Perú

No hay duda de que no os vamos a descubrir nada nuevo de Machu Picchu, pero no por ello podíamos dejar de recomendaros un lugar tan maravilloso y con tanta historia como este. Esta antigua ciudad inca construida a mediados del siglo XV, que se encuentra a una altura de 2.453 metros sobre el nivel del mar, significa en la lengua andina quechua 'De la Vieja Montaña'.

Según documentos de mediados del siglo XVI, se cree que esta ciudad fue una de las residencias del noveno inca del Tahuantinsuyo, Pachacútec. Sin embargo, algunas de sus mejores construcciones y el evidente carácter ceremonial de la principal vía de acceso a la llaqta dan cuenta de su origen anterior a Pachacútec y a su presumible utilización como santuario religioso.

Pero, además de su valor histórico y su belleza, Machu Picchu es considerada una obra maestra de la arquitectura y la ingeniería. Todo ello, sobre un manto de misterio tejido por la buena parte de la literatura publicada que habla sobre el lugar, hace de este enclave una de las siete maravillas del mundo y sin duda, uno de los mayores tesoros turísticos de Perú.

No dejes que su fama infinita te prive de visitarlo. A pesar de que es uno de los sitios más conocidos del mundo, es un espacio que si se tiene la posibilidad se debe visitar. Esta Semana Santa si buscas algo especial Machu Picchu, donde las obras del ser humano y de la naturaleza se entremezclan, puede ser una opción inmejorable. Nunca olvidarás este espectáculo.